EL USO DE INTERNET EN LA ACTUALIDAD

Internet se ha convertido en una parte importante de nuestra vida, permitiéndonos buscar información, ver vídeos, escuchar música, jugar a videojuegos, y conectarnos con quien queramos, en cualquier momento del día, independientemente de dónde nos encontremos, siempre y cuando tengamos conexión a la red.  

El uso de Internet ha ido evolucionando con el paso del tiempo. Hasta hace unos años, nos daba la sensación de que, en Internet, "todo es gratis". Por ejemplo, páginas como Wikipedia o Youtube, nos permiten informarnos y ver vídeos sin pagar nada a cambio. Sin embargo, aunque este tipo de contenido gratuito sigue existiendo, en los últimos años, han ido apareciendo plataformas de pago, ya sea mensual o anual, como por ejemplo, Netflix, iTunes o eBooks.

Internet se ha convertido en un negocio muy atractivo y lucrativo. Para que nos hagamos una idea, según un informe de Deloitte, a fecha del 2018, se generaron unos 545.000 millones de dolares en contenidos y eventos en linea. Además, el 50% de los adultos en países desarrollados tenían al menos dos suscripciones a medios online de pago, dato que a fecha de hoy sigue aumentando.

Pero ¿tenemos todos acceso a la red en las mismas condiciones? La respuesta es no. Deloitte hablaba de personas en países desarrollados. Hay muchos países y regiones a los que todavía no les ha llegado la revolución de Internet por diferentes motivos, bien porque no pueden permitirse las infraestructuras por cuestiones de dinero, porque están en guerra, u otros motivos igual de serios.

Además, incluso en los países desarrollados, como por ejemplo EEUU, se les puede complicar el acceso a la red. En el año 2017, el gobierno estadounidense presidido por Trump puso fin a la neutralidad en la Red que el gobierno de Obama había impulsado. Este cambio, según sus detractores, suponía acabar con la igualdad de los usuarios en Internet, ya que, desde ese momento, los proveedores del servicio podían establecer limites al acceso a la red como, por ejemplo, establecer un sistema con diferentes velocidades en función del pago y de los intereses de los operadores.